Endulzante vs Azúcar: Te sorprenderás
¿El endulzante es más sano que el azúcar? ¿Cuánto endulzante puedo consumir al día?

Tal vez te encuentres pensando que falta menos para el verano y quieres deshacerte de esos kilitos de más que sumaste en el invierno.
Puede que desees terminar el año controlando tu diabetes. O que te sientas tentado de empezar a consumir alimentos más saludables.
Pero tal vez no te es tan sencillo eliminar los dulces de tu dieta y creas que la mejor opción es recurrir a los endulzantes para aportar dulzura a platillos y bebidas.
¿Es esta una buena decisión? En este artículo te dejamos información muy útil que te será de gran ayuda para decidir qué es lo mejor para ti.
EL REY DEL DULCE: EL AZÚCAR
Raro es el hogar en el que no se utiliza azúcar en las preparaciones. Para snacks, tortas, mermeladas y pasteles. En casi todas las cocinas hay un frasco con una etiqueta de “AZÚCAR”. Seguramente tú también tienes uno.
Pero ¿es verdad que debemos verla como a un enemigo?
Es cierto que el consumo de azúcar refinada es causante de enfermedades como la obesidad, la diabetes y los problemas cardíacos. También produce efectos negativos como agitar en exceso a los niños o provocar caries.
Pero, aunque tal vez no lo sepas, este no es el único tipo de azúcar que existe. Podemos encontrar azúcar en distintas fuentes naturales (por ejemplo en las frutas).
Dependiendo de su origen obtendremos numerosos beneficios para la salud. Claro que esto dependerá de la porción que ingieras.
El azúcar es indispensable para el buen funcionamiento del organismo ya que:
- Es la columna del ADN.
- Fortalece las células.
- Brinda energía y contribuye a su almacenamiento.
Pero ¿sabes qué es verdaderamente el azúcar?
Comencemos por entender que el azúcar es un tipo de hidrato de carbono que se encuentra en muchos alimentos y puede obtenerse de forma natural.
En la leche se presenta como lactosa, en la fruta como fructosa. También podemos encontrar azúcar en la miel. De estas fuentes es que obtendrás los verdaderos beneficios del azúcar.
Por el contrario, el azúcar refinada, también llamado sacarosa, es el resultado de un proceso de industrialización de la caña de azúcar. Puede decirse que también es natural pero ¿sabías que aunque es natural, no es nutritiva?
Esto se debe al proceso de refinación. En este, se quitan todas sus características nutricionales. Por eso, el azúcar refinada te aportará dulzor pero no nutrientes vitales para tu organismo. Solo te brindará “calorías vacías”.
Ahora hablemos sobre cantidades: ¿Sabes cuánto azúcar debes ingerir diariamente?
Aproximadamente 30 gr para los adultos (lo equivalente a 7 terrones) o 19 gr para los niños. Es importante ingerirla ya que el azúcar ayuda a reponer la energía para mantener en marcha la musculatura y activar el cerebro.
Sin embargo, en la sociedad occidental se suele sobrepasar la dosis recomendada porque se abusa de productos ultraprocesados, confituras y bebidas azucaradas. De modo que ingerimos grandes cantidades de azúcar sin siquiera saberlo.
Los alimentos ultraprocesados además utilizan endulzantes de muy baja calidad para concentrar sabores y dar sensación de saciedad. La ingesta excesiva trae consigo consecuencias físicas y emocionales.
Este es el mecanismo: al incorporar más azúcar de la necesaria, se produce un subidón de energía instantánea que nos hace sentir muy bien. Seguramente has visto alguna película en la que la protagonista, tras un desengaño amoroso, ahoga sus penas en un balde de helado.
Esta rápida carga de energía es el motivo por el que recurrimos al azúcar en las celebraciones o cuando queremos ser reconfortados o recompensados emocionalmente. ¿Conoces esta sensación?
¿SABES QUÉ ES UN ENDULZANTE?
Los endulzantes son sustancias sustitutas del azúcar, que aportan un sabor dulce a los alimentos.
Se clasifican en:
- Artificiales: que se elaboraron en un laboratorio.
- Naturales: no tienen procesos de industrialización.
Los endulzantes artificiales son sustitutos sintéticos del azúcar, como por ejemplo la sacarina.
Los endulzantes naturales son sustitutos naturales del azúcar, como jugos, néctares de frutas o miel. Estos son más sanos porque no son creados en un laboratorio.
En las sociedades estamos mal acostumbrados a llamar endulzantes a los productos que reemplazan al azúcar de manera artificial.
¡Ahora lo sabes! Los endulzantes también pueden ser naturales.
PURA CASUALIDAD: ENDULZANTES ARTIFICIALES.
En 1987 el químico Constantin Fahlberg, después de sintetizar compuestos orgánicos derivados del alquitrán, olvidó lavarse las manos. Así fue como notó que las mismas tenían un sabor dulce.
Luego de investigar, descubrió cuál era el elemento que le proporcionaba ese sabor y lo denominó sacarina. En latín quiere decir azucarado.
A partir del siglo XX este descubrimiento se comenzó a utilizar como edulcorante en bebidas y alimentos.
Algo similar sucedió con el descubrirse el aspartame por parte del químico Schlatter.
Los endulzantes artificiales son muy usados en diversas dietas porque prácticamente no contienen calorías. Sin embargo, su consumo excesivo puede llegar a crear adicción, disminuir la percepción del sabor dulce natural, aumentar el consumo total de azúcar o dañar el microbiota intestinal.
Ten en cuenta que existen endulzantes artificiales como la sucralosa, el aspartame y el ciclamato, que están prohibidos en algunos países donde se considera que causan daños en la salud.
¿CUÁNTO ENDULZANTE PUEDO INGERIR DIARIAMENTE?
La cantidad adecuada para tí dependerá de cuál endulzante elijas y de tu peso, porque el valor máximo se establece para cada endulzante y por kilogramos de peso corporal. Para esto lo mejor es tener en cuenta la Ingesta Diaria Admisible o IDA (es decir la cantidad que se puede ingerir diariamente de una sustancia sin que suponga riesgo para tu salud).
Para un adulto de 70 kilos se estima un máximo de:
– Ciclamato y sacarina 11 sobrecitos.
– Stevia 8 sobrecitos.
– Aspartame 80 sobrecitos.
– Sucralosa hasta 109 sobres.
Por otro lado, ten en cuenta que no es recomendable el edulcorante de ningún tipo en niños menores de 3 años.
CAMBIO DE HÁBITOS: ENDULZANTES NATURALES.
Los endulzantes naturales son los que provienen de vegetales o animales y que después de ciertos procesos simples, están listos para usarse en alimentos o bebidas.
Se dividen en:
- Calóricos.
El proceso que atraviesan para llegar a ti es artesanal o nulo.
Dentro de esta categoría están las mieles, como la miel de abeja o de maple que se caracterizan por su gran aporte de nutrientes, vitaminas, minerales y antioxidantes.
Y también dentro de los endulzantes naturales calóricos encontramos la sacarosa, glucosa, fructosa y lactosa que se encuentran principalmente en las frutas, legumbres y lácteos.
- No calóricos.
A esta categoría pertenece por ejemplo la stevia, que se obtiene de la planta stevia rebaudiana. Es ideal para diabéticos y naturistas.
LOS ENDULZANTES ARTIFICIALES ENGAÑAN A TU CUERPO.
El poder endulzante es la capacidad que tienen los distintos edulcorantes naturales y artificiales de producir dulzor.
Los endulzantes artificiales tienen mucho mayor poder endulzante que los naturales. Por ejemplo la sacarina tiene un poder edulcorante 300 veces más potente que el azúcar, mientras que el aspartame es unas 200 veces más dulce que el azúcar.
Esto se debe a la estructura molecular de los edulcorantes artificiales. La misma interactúa muy efectivamente con los receptores que tienes en tu lengua para el sabor dulce. Así, una pequeña cantidad de producto, produce un gran dulzor.
Lo que de seguro no sabías es que esta estructura confunde a tu cuerpo: cuando ingieres algo dulce tu cuerpo entiende que recibirá energía, pero los endulzantes no la poseen.
Entonces resuelve este conflicto comiendo para compensar esta situación, buscando el equilibrio entre la ingesta y el resultado. ¡Pero cuidado! Este mecanismo puede hacer que sigas sintiendo “hambre” a pesar de haber ingerido una porción abundante.
Además de esto, numerosos estudios indican que el consumo sostenido de endulzante puede generar un aumento de peso. Los edulcorantes producen una respuesta insulínica que puede favorecer el almacenamiento de grasa.
Es importante que puedas llevar una alimentación equilibrada, adoptando hábitos saludables. Para ello, decidir la manera de endulzar tus alimentos puede marcar la diferencia.
Con calorías o sin ellas, naturales o artificiales, la elección depende de ti. Ahora ya conoces las diferencias y puedes optar por lo que más se adapte a tus metas y estilo de vida.
Y por supuesto ¡nunca dejes de consultar con tu médico!